Sabes que hay cosas en la sociedad que hay que proteger y es para que nadie salga perjudicado. Hay cosas realmente importantes que hay que proteger, y es asegurarse de que no nos ponemos en peligro no sólo a nosotros mismos, sino también a los que nos rodean. Por esta razón, hay principios que deben seguirse. Por supuesto, a algunas personas no les gusta que les digan qué hacer o qué no hacer y desafían ciertas normas, pero en muchos casos es completamente innecesario, porque de todos modos no pasará nada. A menudo no hay realmente ninguna respuesta a una protesta concreta.
Hay otras cosas que la gente debería tener en cuenta, no sólo en cuanto a las normas por las que debería regirse la sociedad, sino también en otros aspectos. Si no te gusta lo que te dan, a menudo no hay nada que puedas hacer al respecto. Tienen que entender que no deben poner en peligro a los demás. Si no se siguen ciertas normas y principios, hay muchas posibilidades de que el resultado sea que no trabajen en un determinado país, y eso no es bueno. Cada sociedad y cada país tiene ciertas reglas, y si no te gustan esas reglas, tienes que irte a otro sitio que te guste.
Sin duda existen esas opciones, pero en algunos países la ciudadanía no es tan fácil. Las personas que no están satisfechas con la sociedad en la que viven tienen la oportunidad de intentarlo en otro lugar. Sin embargo, es necesario fijarse no sólo en las ventajas que tiene una sociedad determinada, sino también en sus desventajas. Es fácil centrarse sólo en las ventajas, pero eso no es lo ideal. Es mejor averiguarlo todo de antemano para no llevarse sorpresas después. Hay que seguir las normas y políticas, porque son importantes no sólo para ti, sino también para los que te rodean. Obtener toda la información posible y hacerte una idea general te ayudará a decidir qué te conviene y qué no.